A través de nuestra creatividad, las personas podemos expresar emociones, pensamientos, sentimientos y relaciones con los demás. En el congreso se ha puesto de manifiesto la necesidad de desarrollar estas capacidades en los centros educativos con propuestas pedagógicas flexibles que ayuden a potenciar la creatividad de los más pequeños. Para ello se puso de relieve la necesidad de que los equipos docentes cuenten con una sólida formación, y la elaboración de programas educativos novedosos destinados a promover el desarrollo de dicho potencial.
La organización del evento ha corrido a cargo de la Asociación Mundial de Educadores Infantiles (AMEI-WAECE). Entre los ponentes, Adriana Salazar ha brindado una nueva forma de ver el ajedrez, no solo como medio para el desarrollo de la habilidad mental, sino también para el de la paciencia, empatía o perseverancia.
Otros ponentes como Rafael Sanz y Rosa María Iglesias han insistido en la importancia de la lectura y escritura. José Antonio López Parreño (Rodorín), mostró como convertir el habla en una expresión artística y la Presidenta de la Asociación Pedagógica Francesco Tonucci clausuró el evento, haciendo hincapié en que la educación infantil del siglo XXI está en manos de los profesionales que trabajan día a día, con ganas, ilusión, práctica y formación.
Durante el transcurso del evento se hizo entrega del Premio a la Excelencia e Innovación Educativa que convoca la Asociación Mundial de Educadores Infantiles en asociación con otras entidades y que este año recayó en Eva María Velayos por su obra “Tras las huellas de los cuentos europeos”.
Al finalizar el congreso, la directora del Grupo Regenbig, Lola Sancho, aprovechó la oportunidad para hablar con Juan Sanchez, presidente de AMEI-WAECE y comentarle sus impresiones y de cómo se están llevando a cabo en las academias del Grupo Regenbig.
Desarrollar las capacidades creativas de los más pequeños permite el desarrollo paralelo de otras habilidades en multitud de aspectos: artísticos, sociales, políticos, científicos, etc. También ayuda a mejorar el aprendizaje de otras disciplinas, como por ejemplo el aprendizaje de una segunda lengua. ¡Aprender inglés es más divertido si los niños dan rienda suelta a su creatividad e imaginación!
Chiquilín: Su futuro empieza aquí
